Para aquellos a los que nos apasionan los videojuegos, resulta alentador leer cada vez más noticias que destacan la creciente importancia y relevancia de este sector. Más increíble es ser testigo- para los que nacimos en la década de los 90- de la transformación que han experimentado los videojuegos. Desde los juegos en blanco y negro de la Game Boy, a la inmersión en increíbles realidades virtuales de las Oculus Rift.
En España, los datos hablan por sí solos. Según el último informe anual de AEVI, en 2016 se facturaron 1163 millones de euros por la venta de videojuegos, un 7,4% más que el año anterior, situándose como la primera industria audiovisual del país, muy por encima de la música y el cine. Y es que son más de 15 millones de personas las que dedican una media de 6 horas por semana a esta actividad. Así pues, nos encontramos ante un mercado con una tendencia y crecimiento sostenible, por el que las empresas españolas y gobierno ya apuestan fuertemente; así lo indica el Plan Cultura 2020, que incluye proyectos destinados a favorecer la consolidación y crecimiento del sector del videojuego.
El auge de los estudios de producción, así como de las empresas de distribución- que ven ampliado su crecimiento y capacidad-, junto al surgimiento de nuevas profesiones basadas en la capitalización de la atención mediática de los videojuegos, genera nuevas necesidades de desarrollo a nivel comunicativo, lo que representa una oportunidad única para este sector.
Analicemos algunos hechos clave que contribuyen- y seguirán haciéndolo- a generar nuevas oportunidades de negocio en el ámbito de la comunicación aplicado al sector de los videojuegos:
- Evolución de los eSports: hablamos de un negocio muy joven con gran capacidad de crecimiento. Según la consultora Newzoo, este negocio ha movido en España 5,3 millones de euros en 2016, mientras que la previsión es que en este año sea de prácticamente 10 millones de euros. Este crecimiento está justificado por la creación de nuevos equipos, nuevos torneos, y sobre todo, por la incorporación de nuevos juegos a nivel profesional, lo que implicará una mayor dedicación de recursos al impacto mediático -a través de entrevistas, espacios en medios y retransmisiones-, además de nuevos patrocinios.
- Eventos de videojuegos, en su mejor momento: nunca en España se había dado el caso de que dos eventos de videojuegos generaran tanto éxito. En 2017, Barcelona Games World y el Madrid Gaming Experience están arrollando con las estadísticas de afluencia (239.000 asistentes en total) y número de expositores (403 empresas en total), a pesar de haber celebrado únicamente dos ediciones, respectivamente. Todo apunta a que seguirán experimentando este crecimiento en 2018, lo que abrirá la vía a nuevas necesidades de gestión y cobertura mediática. Las marcas del sector apostarán cada vez más por este tipo de eventos y competirán en presencia para tener un contacto más directo y destacado con el consumidor.
- Influencers y youtubers ‘gamers’: sin duda, la de los videojuegos es una de las áreas que mayor número de influencers y youtubers concentra en España. De hecho, varios de ellos tienen una cantidad ingente de seguidores, fruto de un éxito cultivado en base a contenidos sobre videojuegos, como el famoso Rubius. Tantos hay ya, que cada vez el grado de diversificación es mayor y muchos de ellos ya se especializan en un tipo concreto de plataforma o de género –estrategia, acción, indies, etc.-. A nivel comunicativo, la evolución de esta diversificación y la popularización de nuevos perfiles y canales especializados pueden generar nuevas oportunidades de colaboración para las marcas.
- Inmersión en las agendas políticas: 2016 ha sido un año clave porque, por primera vez en España, la industria del videojuego ha comparecido en una cámara legislativa, y no solo eso; el Congreso de los Diputados han aprobado medidas dirigidas a facilitar inversiones internacionales en este sector, así como el desarrollo de la industria local.
Y es que la importancia de los videojuegos va mucho más allá de lo económico y del entretenimiento. Se trata de un medio innovador e influyente que nos ayuda a potenciar nuestras capacidades y a explorar nuestros límites, con todos los beneficios que puede conllevar para nuestra sociedad.
Alex Carcasona| Ejecutivo de Cuentas División Consumo y Salud
