No, no me ha dado un ataque repentino de amor pero sí de orden y concierto porque hoy quiero hablaros del principio KISS. Un concepto que me explicaron en clase de diseño gráfico y que, de verdad, deberían enseñarnos en el colegio.
Keep it simple, stupid! o KISS -aunque habría que modificar algunos términos a la hora de introducirlo en la enseñanza primaria- viene a ser una máxima que establece que la simplicidad debe ser el objetivo clave en el diseño de cualquier sistema.
Y aunque el origen de este término no se conoce con exactitud, tal y como explica Wikipedia, lo cierto es que es un principio realmente práctico a la hora de diseñar presentaciones, ya sea en Power Point o cualquier otra herramienta de edición contenido.
¿Por qué? Pues porque o bien eres de los que pasas horas delante de una misma diapositiva, moviendo todos los elementos de aquí para allá esperando descubrir la posición idónea; o bien, eres de los agraciados que has nacido con el gen del diseño incorporado. Pero en cualquier caso, conocer más acerca de este concepto y las posibilidades que ofrece sólo puede facilitarte la vida.
¡Atención! Aquí van un par de consejos para crear presentaciones con criterio, consiguiendo diapositivas suficientemente atractivas a la vista y, sobre todo, legibles:
- Crea una plantilla única sobre la que trabajar, así ahorrarás mucho tiempo porque te servirá de guía a la hora de introducir cajas de texto, gráficos e imágenes. Para ello elige los colores que van a predominar en tu presentación y el estilo de esta. (Trabajar sobre el patrón de diapositivas es el modo más
sencillo de hacerlo con Power Point).
- Ni para ti, ni para mí: fondos neutros. Favorecen la uniformidad de las dispositivas y ayudan a destacar los puntos más importantes (datos, cifras, etc.).
- Más visual, menos textual. Apostar por imágenes y videos de buena calidad, sin marcas de agua ni pixelización.
- Textos aptos para miopes. Utiliza tipografías sans serif (sin remates) porque son más legibles en pantalla. Pero ¡ojo! nunca en tamaños inferiores a 20 puntos.
- Contenido minimalista. Emplear poco texto. Es mucho más positivo dar un par de pinceladas que te sirvan para apoyar el discurso y no copiar todo el párrafo.
Éstos son sólo algunas ideas que quizás pueden inspiraros a la hora de enfrentaros a la próxima presentación de vuestras vidas. Aunque lo cierto es que en otros blogs podéis encontrar un millón de consejos más. A mí me ha parecido muy interesante la recopilación que hace Alex Rister en su blog. Y muy entretenido el listado de los cinco errores que debes de evitar en Power Point con Jesse Desjardins.
Pero eso sí, siempre, siempre, siempre, recordad el principio KISS. Demasiados elementos causan confusión. Keep it simple, stupid!
Jara Expósito, Ejecutiva de cuentas en la División de Consumo&Salud