Mario Cantalapiedra: “Estar o no en redes sociales es una cuestión de coste de oportunidad”

Mario CantalapiedraMario Cantalapiedra es economista, escritor técnico y docente. Su pasión por la economía, y su habilidad como comunicador, le llevaron a lanzarse a explicar para todos el complejo mundo de las finanzas a través de las redes sociales. Gracias a ese afán ha sido finalista por segundo año consecutivo de #Tweco, barómetro de Crédito y Caución del economista más influyente en Twitter.  

Hablamos sobre la comunicación de las entidades financieras y de la importancia de las redes sociales en este sector:

 Las redes sociales, ¿han cambiado la forma de comunicar?

Considero que sí. Fundamentalmente por la velocidad a la hora de transmitir los contenidos y el protagonismo que tienen los usuarios en la evolución del conocimiento; deciden qué, cómo y cuándo comparten algo, también deciden si lo comparten o no.

Un tema que han traído las redes es la libertad (son difícilmente censurables); para muchos usuarios resulta atractivo el anonimato que, en ocasiones, implican. Estoy a favor de que no se pueda decir todo por Twitter, la gente insulta, acosa… En este sentido, soy partidario de cierta regulación. En el mundo de la tecnología todo avanza muy rápido. No sé exactamente por dónde avanzarán, puede que en el futuro sean algo diferente a lo que tenemos hoy en día.  El modelo en redes sociales, se construye poco a poco.

¿Cómo comenzaste en las redes sociales? ¿Por qué decidiste abrirte un perfil en Twitter, Facebook o LinkedIn?

En LinkedIn lo hice por iniciativa propia a finales de 2008 (me pareció una red interesante para realizar contactos profesionales). No recuerdo exactamente cómo conocí la red, supongo que alguien me hablaría de ella y me pareció útil.

En Twitter y Facebook por motivos profesionales a finales de 2009. Fui invitado a participar en un proyecto de comunidad profesional que implicaba gestión de redes sociales para directivos vinculado a una revista (Estrategia financiera) en la que por entonces escribía. Recibí formación sobre estas redes y comencé a utilizarlas, sobre todo Twitter.

¿Cómo convencería a una entidad financiera de que tiene que estar en redes sociales?

Le haría un planteamiento en términos de coste de oportunidad: ¿puede permitirse no estar en ellas si están sus competidores y clientes? Ya no están solos los jóvenes o los famosos, empieza a haber empresas de bolsa, de consultoría, etc. que están en Twitter. Al menos tengo que saber qué es.

En ese sentido, los directivos de comunicación de las entidades deberían verlo como una inversión a largo plazo. Es una buena vía de comunicación complementaria para un banco, algo que los clientes valoran.

En el sector financiero Facebook, a lo mejor no triunfa tanto. Es, quizás, una red social más personal. En cambio, sí funciona bien para otros sectores como el turístico, donde ya se puede, por ejemplo, hacer reservas de hoteles o restaurantes directamente desde Facebook.

Al final tenemos que distinguir de qué red social estamos hablando. Cada red tiene su propio código de comunicación. Twitter es sobre todo una herramienta instantánea, en Facebook el mensaje dura más y Linkedin la veo evolucionando, aunque siga dirigida al ámbito profesional.¿Qué nota le pondrías a las entidades financieras españolas a la hora de comunicar en redes sociales? ¿Lo están haciendo bien? ¿Qué mejorarías?

Hay diferencias entre entidades. En el terreno positivo me gusta la labor del BBVA, desde hace tiempo, y últimamente destacaría a Bankinter.

¿Qué es para ti un influencer?

Alguien que aporta valor generando contenidos que interesan al público, conversa, escucha y transmite de forma honesta esos contenidos de valor.

Hablando de influencers… un año más apareces en el ranking de los #Twecos, cuentas de Twitter con mayor influencia en la economía. Enhorabuena.

¡Sí! Pero ojo con esto, significa que soy mejor economista que otro colega que no tenga Twitter. No, eso significa que los usuarios de Twitter me han seleccionado para estar en ese nivel por la labor que hago en esta red social. Una anécdota curiosa, en Klout estoy al mismo nivel que Belén Esteban, así que tan mal no puedo estar, ¿verdad? (risas).

Por otro lado hay que desmitificar el número de seguidores porque no es tanto la cantidad, como la calidad. Es más importante que te siga alguien relevante que muchos que no lo sean.

¿Cómo deberían relacionarse los Dircom y las agencias de comunicación con los influencers en el sector financiero?

Escuchándoles, conversando con ellos, mostrando honestidad más allá de la marca que tienen que defender, siendo cercanos. Al final a todos nos gusta saber que hay personas detrás de los perfiles de redes sociales. Las personas confiamos en las personas.

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