BlackFriday y CiberMonday… Si sabemos cómo ahorrar, ¿por qué no lo hacemos bien?

La llegada de las fiestas de navidad y fin de año conlleva un aumento del consumo, que parece incentivarse con el Black Friday y  el Ciber Monday, dos modalidades de descuentos recientemente introducidas en España. Con el objetivo de aumentar las ventas por parte de las empresas y de ahorrar algunos euros de cara a las fiestas por parte de los consumidores, éstas fechas son un momento clave para empezar a planificarse de cara al próximo año, sobre todo a nivel financiero, evitando así la llamada «cuesta de enero». Sin embargo, la realidad que nos encontramos es otra;  una falta de desarrollo del hábito del ahorro que acaba perjudicándonos a nosotros mismos.

post-candela2Ahorrar debe convertirse en un ejercicio consistente, adaptado a nuestra situación y a nuestras metas personales. La teoría está clara: compra lo que se necesitas y no sólo lo que quieras, acumula un fondo de emergencia, establece prioridades y un presupuesto y  aparta de tu nómina lo que quieras ahorrar. Estos son algunos de los consejos que se repiten con frecuencia, pero, ¿de verdad los incorporamos a nuestra vida cotidiana?

Según el Barómetro del Ahorro publicado por el Observatorio Inverco el año pasado, los ahorradores españoles tienden a ser conservadores en la gestión de sus recursos. Los motivos que impulsan su planificación financiera son, en primer lugar, contar con efectivo frente a imprevistos y, en segundo lugar, complementar la jubilación. La preocupación por la financiación del sistema de pensiones estatal ha logrado que los planes de pensiones privados sean de los productos más populares entre los ahorradores españoles y ocupen ya un segundo lugar por detrás de los tradicionales depósitos.

Sin embargo, los previsores son todavía una minoría. El Estudio de Preparación para la Jubilación 2016 de la aseguradora Aegon indica que tan sólo 27% de los españoles ahorra de manera habitual para preparar su jubilación, cuando la media internacional es de 38%. La mayoría da por descontado que deberá seguir trabajando a tiempo parcial o completo una vez cumplida la edad de jubilación, mientras que muchos confían en que recibirán una pensión estatal lo suficientemente cómoda como para no tener que complementarla con un plan B. post-candelaEl optimismo es una gran cualidad, pero en materia de ahorro es mejor estar preparados para el escenario más desfavorable. Los beneficios de economizar no sólo se disfrutan en la jubilación. Podemos plantearnos de cara al año que viene reflexionar sobre qué podríamos cambiar en nuestro día a día para hacer crecer la hucha, aumentar nuestra seguridad financiera y cumplir nuestras metas y planes más importantes sin preocupaciones monetarias. Para ahorrar, nunca es demasiado pronto.

Candela Farroni es Ejecutiva de Cuentas en Comunicación Financiera

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